por David Villafranca
LOS ANGELES, Estados Unidos.- Desde jornaleros que cruzan la frontera hasta enólogos y dueños de bodegas, el documental “Harvest Season”, del director Bernardo Ruiz y que estrena este lunes la cadena estadounidense PBS, explora la influencia e importancia de los mexicanos en la producción de vino en California.
El condado de Napa, una referencia indispensable para los amantes del vino, es el escenario de este filme que, además de contar las historias de los mexicanos involucrados en esta industria, también echa un vistazo a la pasión que ha despertado esta bebida durante siglos.
“El vino ha inspirado tanta poesía, tanta literatura… Para mí, es algo sencillo: a pesar de todo lo que hemos estudiado en cuanto a ciencia y cultivación, sigue habiendo como una especie de magia en hacer un buen vino. Hay algo que está fuera de nuestro control”, explicó Ruiz en una entrevista telefónica con EFE.
Nacido en Guanajuato (México) pero criado en Nueva York (“Siempre digo que soy ‘guanayorquino”, bromeó), Ruiz dirigió los documentales “Reportero” (2013) y “Kingdom of Shadows” (2016) y aseguró que, aunque “Harvest Season” supone una novedad en su filmografía, siempre se ha interesado por “la relación amor-odio” entre Estados Unidos y México.
“Estaba buscando un cambio. Ya había hecho dos documentales sobre la llamada guerra contra el narcotráfico en México y los atentados contra periodistas. Ahora quería hacer algo más cercano a la vida, algo más bello, y esta fue mi manera de interrogar los mismos temas pero a través de otra mirada”, indicó.
“Harvest Season” retrata las vidas de empresarios y bodegueros de origen mexicano como Gustavo Brambila y Vanessa Robledo, cuyas familias se han dedicado a los viñedos californianos durante generaciones.
Y el filme también se acerca a los jornaleros mexicanos como René Reyes que viajan cientos de kilómetros para trabajar muy duramente en las viñas durante meses y lejos de sus familias.
“Quería narrar una historia en capas y demostrar que hay varias experiencias latinas y mexicoamericanas”, señaló Ruiz, quien destacó que pocas veces se habla de “la segunda, tercera o cuarta generación de mexicanos” que se dedican a hacer vino en California y sobre los dilemas que sienten por su identidad híbrida.
“Gustavo llegó a Estados Unidos a los 3 años. Lo que siente es una obligación a través de su madre de regresar a Jalisco, pero él ya no es de ahí: es de Napa. Es más que californiano que cualquier cosa y tiene ese conflicto. Siente esta llamada para regresar, pero a la vez también tiene miedo de no ser aceptado allá”, argumentó.
En otro sentido, el documental ahonda en las vidas de los jornaleros y sus delicadas situaciones personales.
“Todos los sentimientos de la película están en la escena en la que René, después de haber estado en California por cinco meses, regresa a su pueblo en Michoacán y ve a sus hijas y su esposa. Por un lado, regresa con su propia cosecha: las computadoras que regala a su hijas. Por el otro, está la ausencia que ha padecido su familia”, describió.
“Como realizador, hasta me dio cosa filmar eso, porque es un momento muy íntimo, pero también me dio gusto que pudimos captarlo porque sigue siendo una realidad invisible para muchos en Estados Unidos.: el costo de la mano de obra, el precio que pagan los que vienen a trabajar, los sacrificios que hacen”, agregó.
El director reflexionó sobre cómo pese a ser insustituibles, ya que prácticamente nadie en Estados Unidos quiere ser trabajador en un viñedo por las duras condiciones y los bajos salarios, los mexicanos deben soportar el racismo alentado por los sectores más derechistas.
“El fenómeno actual tiene paralelos con otras épocas en la historia. En la Gran Depresión en los treinta hubo una deportación masiva de mexicanos. Después, durante la Segunda Guerra Mundial, hubo una importación masiva de trabajadores mexicanos con el Programa Bracero. Luego, en los cincuenta, está la Operación Wetback y empiezan a deportar de nuevo”, recordó.
“En tiempos de crisis económica y de percepción de crisis, siempre ha habido un ataque contra poblaciones vulnerables”, apuntó el realizador, quien resaltó que, pese a la “criminalización” que sufren, los hispanos han demostrado un alto nivel de “resiliencia”.
EFE.